El 15 de marzo SEAPA mantuvo una reunión con la Directora Gerente del SESPA (Dña María Concepción Saavedra), la Directora General de Política y Planificación Sanitaria (Dña Montserrat Bango) y la subdirectora de Coordinación Asistencial y Cuidados (Dña Rocío Allande) tras haberla solicitado para tratar varias cuestiones importantes relacionadas con la Enfermería Familiar y Comunitaria.
En el encuentro planteamos nuestra preocupación acerca del desarrollo de varios aspectos fundamentales que recoge el Plan de Acción de Atención Primaria y Comunitaria 2022-2023, aprobado por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, el 15 de diciembre de 2021, en el Servicio de Salud de Asturias, entre los que destacamos los siguientes:
Acción 5.1. Creación de la categoría profesional de enfermeras/os especialistas en Enfermería Familiar y Comunitaria en Atención Primaria en todas las CCAA.
Resultado: El 100% de las CCAA con categoría profesional de enfermera/o especialista en Enfermería familiar y comunitaria en AP publicada en el año 2022.
Acción 5.2. Fomento de los nombramientos de enfermeras/os de AP, incluyendo como mérito prioritario el título de especialista en Enfermería Familiar y Comunitaria (EFYC) y arbitrar las medidas organizativas necesarias para ello y para el desarrollo de sus funciones.
Resultado 1: El 100% de las CCAA actualizarán su normativa para la contratación prioritaria de enfermeras/os especialistas en EFYC en AP en el primer semestre del 2023 como máximo.
Resultado 2: Al menos un incremento anual del 20% de los nombramientos de enfermeras y enfermeros en AP con el título de la especialidad de EFYC en 2023.
Asturias es una de las pocas excepciones en España que no tiene creada aún la categoría correspondiente a la especialidad de Enfermería Familiar y Comunitaria.
El compromiso con el Ministerio fijaba el límite en 2022. No obstante, a falta de que el documento pase varios pasos previos a la publicación en el BOPA, según nos informaba la Administración, el proceso todavía se alargará varios meses más.
Esto es algo que lamentamos porque entendemos que entorpece el desarrollo de las funciones propias a la vez que supone una interrupción en la docencia de la especialidad, desaprovechando el potencial de los profesionales que han recibido una formación específica, especializada, en este ámbito. Es una cuestión de agilidad, eficiencia y calidad asistencial.
La Enfermería Familiar y Comunitaria supone una oportunidad para dar un giro a la Atención Primaria. Convencidas de ello, seguiremos remando en la misma dirección y colaborando en todo aquello que pueda contribuir a una mejora de los cuidados que prestamos las enfermeras.