Estimados socios, varios compañeros nos han solicitado que nos manifestemos ante los cambios que se están produciendo en nuestra Comunidad, tanto en tema de horarios como en la composición de los equipos directivos de las Áreas Sanitarias.
Con respecto al primer tema, es decir, la apertura de Centros por las tardes, en la sociedad profesional consideramos que es un tema laboral, por ello, no entra dentro de nuestras atribuciones y creemos que no debemos manifestarnos.
Sí, en cambio, tenemos algo que decir en cuanto al contenido que se le quiere dar a la actividad a desarrollar en ese horario, a las diferencias observadas entre las distintas áreas sanitarias y a la falta de diálogo de algunas gerencias, haciendo gala de una intransigencia en algunos aspectos que resulta muy difícil de entender. Todo ello demuestra una gran improvisación, falta de uniformidad de criterios y falta de transparencia en los objetivos que se pretenden conseguir con esa medida, con una manifiesta imprecisión, carencia de comunicación, y claridad a la hora de justificar esos cambios. No podemos, por tanto, más que expresar nuestro malestar y disconformidad.
En el contexto de crisis económica en que nos encontramos, se renuevan los consejos de expertos sobre la potenciación de la Atención Primaria para hacer sostenible el sistema y se pone de relieve el papel de las enfermeras, invitando a aumentar sus competencias y redefinir las cargas de trabajo de los distintos profesionales que conforman los equipos; ello hace necesario contar con equipos directivos con fuerte presencia de profesionales de AP, tanto médicos como enfermeras, que conduzcan a que el sistema gire en torno a una AP renovada y evitar que con la pretensión de integrar niveles se deriven los recursos, y lo que es peor el modelo asistencial basado en la hiperespecialización y la parcelación, hacia el hospital.
Estamos viendo con inquietud cómo en lugar de reforzar la presencia de directivos de este nivel asistencial, está ocurriendo lo contrario y se están formando equipos directivos con predominio de personas provenientes de atención especializada en detrimento de la AP, cómo la presencia de enfermeras comunitarias es testimonial y cómo determinadas subdirecciones de enfermería de AP quedan sin cubrir.
Consideramos imprescindible y así lo reclamamos a nuestras autoridades sanitarias, profesionalizar la gestión sanitaria, contando con enfermeras comunitarias con experiencia, competencia profesional y capacidad de liderazgo, en los órganos de dirección, que participen en la toma de decisiones (también a nivel político) sobre el cuidado de la salud, que propicien una cartera de servicios enfermeros acorde a las necesidades de la población, que promuevan un nuevo perfil profesional más acorde con las competencias definidas en el programa de la especialidad, y promocionen el papel de las enfermeras como líderes en procesos de mejora y de calidad del sistema.
Gijón, octubre de 2012
Junta directiva de SEAPA